jueves, 30 de enero de 2014

Capitulo 3 (1a Parte)


Esa noche casi ni pegué ojo, no sé si fue porque por primera vez era yo quien tenía la incertidumbre de nuestro destino o porque tras mucho insistir Christopher y yo dormimos en la misma cama. Yo en mi lado derecho intentando ni rozar un ápice de su piel y él en el izquierdo haciendo la misma pirueta casi imposible. Pienso que él tampoco durmió en toda la noche, quizás pensase que si me rozaba o algo sería como traicionar a Mariel.


Tiene que ser bonito estar así de enamorado y que te correspondan, y ni que decir de que tu amor sea prohibido. Ese sentimiento de imposibilidad, esa lucha por lo prohibido. Llevar tu amor por bandera contra viento y marea. Son muy afortunados. Quién sabe, quizás el hombre de mis sueños también luche por mí con esa valentía y arrojo. 

lunes, 27 de enero de 2014

Capitulo 2 (8ª Parte)


¿Dónde estoy? Me encuentro rodeada de espejos pero no me reflejo en ellos ¿Por qué? Una voz de fondo susurra: Antes de que sea demasiado tarde… ¿Antes de que sea demasiado tarde el que?

Un gran estruendo ¿Qué ocurre? El sonido procede de abajo ¿De abajo? Espera esto no tiene nada que ver con mi sueño, es real.

Me despierto de un salto, en ese momento Christopher entra en la habitación.

-          ¿Qué ocurre?

-          Nada que el cocinero no cabe en la cocina. Jajaja. Lo ha tirado todo. ¿Y tú sabes ya hacia dónde dirigirnos?

-          Sólo me ha dado tiempo a soñar con espejos, muchos espejos que me rodeaban pero en ninguno salía mi reflejo.

-          ¡Eso es fantástico!

-          ¿Fantástico?


-          Sí, yo sé dónde está ese sitio.

jueves, 23 de enero de 2014

Capitulo 2 (7ª parte)


Al entrar en la habitación, después de haber recorrido un largo pasillo en el que la mezcla de olores era tan dispar, me senté en la cama desolada.

 Mi cabeza daba vueltas como un remolino confuso.

-          - Tan sólo he de dormir un poco, eso es. Así podré soñar y mis sueños me llevaran hacia él.
-  
-                                    - Te dejaré descansar, bajaré a echar un vistazo.


Ya sola poco a poco el sueño me ganó la batalla y me fui adentrando en la vigilia como un pajarillo indefenso.

martes, 21 de enero de 2014

Capitulo 2 (6ª Parte)


- Adamaris, la anciana dijo que tenía que buscar al hombre de mis sueños.

-Suele decirse, aunque yo creí que las princesas os casabais por intereses.

- Literalmente tengo que buscar al hombre de mis sueños, a ver, yo tengo sueños extraños en los que además de sentir lo que en ellos ocurre, siempre sale un hombre al que nunca veo completamente. Y Adamaris piensa que sin él nunca podre gobernar. Es como la parte que me falta, una mitad que crea un todo.

-¿Tendría que opinar?

-No si no quieres.

-Será mejor… Dando por hecho que ese hombre ha de gobernar a tu lado, tendrás que dirigirte a regiones donde el primogénito en la línea de sucesión de ese trono esté aún sin esposa, en edad de contraer matrimonio, y alcanzar un acuerdo con su padre para que se case con la heredera al trono de un reino en decadencia y abandone el suyo, que seguramente tendrá muchos más beneficios que Gadeira… Sencillo.

- Te olvidas de las señales. Son algo que ese hombre debe de tener a la fuerza, sino no será el indicado.

-¡Ah! Más fácil aún.

- ¿Piensas que estoy loca?


-Eso no es lo primero que se me pasó por la cabeza, sino, ¿Cómo vamos a encontrarlo? Me casaré con Mariel cuando mi pelo sea gris y eso con la mayor de las suertes.

viernes, 17 de enero de 2014

Capitulo 2 (5ª parte)


Pasados cuatro días de viaje llegamos a Azaes, estábamos cansados de tan duro viaje, yo casi ni había dormido en todos esos  días con lo cual llego lo inevitable ¿A dónde seguir? Sin ningún sueño no había señales ni destinos. Por lo que sugerí a Christopher quedarnos algún día discretamente en alguna posada de Azaes.
- ¿Recién casados?

-Sí

Respondí casi sin pensar, estaba tan afanada en que nadie me reconociera que no caí en la cuenta de la consecuencia de mi reacción.
-Genial, a dormir al suelo.

-No tienes porqué.

-¿Qué no tengo porqué? ¿Piensas que durmamos juntos? Lo que me faltaba que ahora me acusen de intentar propasarme con la princesa. No, gracias.

-Pues duerme donde quieras.

-Oye ¿Cuánto tiempo nos quedaremos aquí?

-No sé.

-¿No sabes?

-No, no depende de mí.

-Ah ¿De qué depende? Por cierto me vendría bien saber hacia dónde vamos, a qué tendremos que enfrentarnos y ese tipo de cosas.

-De acuerdo, tú lo has querido: Depende de mis sueños, no sé a dónde vamos y tampoco a que nos enfrentamos ¿Más claro?


 -Más confuso diría yo más bien.

miércoles, 15 de enero de 2014

Capitulo 2 (4ª parte)


Tras esa conversación tan reveladora comimos en silencio y pasó un buen rato hasta que logré reponerme de lo que me había enterado. Nunca antes había tenido la conciencia de los sacrificios que el resto de Gadeira había hecho para mantener el reino en mis manos, quizás Christopher llevaba razón y yo no estaba obrando bien dejando Gadeira en un segundo plano para encontrar a un completo desconocido. ¿Debía volverme? Estaba indecisa, lo que sí tenía claro es que los habitantes de Gadeira, y en especial mi Ama y su familia se merecían una recompensa a tanto sufrimiento y sobre todo a su lealtad.
-Te quedaste en el momento en que tu madre te llevo con tu tío…

-¿Qué?

-Tu historia ¿Recuerdas? ¿El motivo por el que me necesitas ayudar?

-Sí claro, eso… Mi tío me acogió como uno más y crecí aprendiendo su oficio. Aunque a mí el ganado no me gustaba mucho y en ocasiones me distraía luchando con espantapájaros y la espada que Dorian me regaló antes de irme, esta que llevo aquí, intentaba honrarlo todo lo que podía. Además de mis tíos convivía con mis dos primas Anette y Mariel, esta última sólo dos años menor que yo. Mariel y yo crecimos juntos prácticamente, de chicos jugábamos juntos y éramos, como nosotros mismos nos bautizamos, hermanos de sangre. A medida que fuimos creciendo ese amor de hermanos se transformó en simplemente amor y llegó un día el primer beso, la primera caricia…

-No hace falta que entres en detalles, te estoy entendiendo. Ahora dime ¿Es por su amor por el que crees tener que demostrar algo?

- Es mi tío que se huele algo y como sobrino sí, pero como marido de su hija no.

-¿Y por qué crees que con esto te aceptará?

-Por la sencilla razón de que a Dorian lo ha aceptado para Anette por pertenecer a tu séquito.


-Importante razón, pues entonces cuando volvamos haré todo lo que esté en mis manos para ayudarte.

lunes, 13 de enero de 2014

Capitulo 2 (3ª parte)


-Tenemos tiempo y según tu historia depende que me acompañes o no.

-Comenzare por el principio: Yo, como ya sabes, me he criado con un hermano de mi madre, ya que al morir mi padre yo era aún pequeño y no podía desempeñar trabajo alguno, por lo que mi madre además no podía hacerse cargo de mí, ya que a su vez al morir los tuyos también tuvo que hacerse cargo de ti.

-¿Renuncio a tí por hacerse cargo de mi? No lo sabía, de veras que no.

-Algo así, más o menos.

-Espera no sigas. Comamos. Tenemos todo un camino para que me cuentes el resto.

-¿Eso significa que puedo ayudarte?

-Creo que te lo debo, pero luego sigue contándome el resto y así sabré también como ayudarte a mi vuelta.

-Si volvemos, porque imagino que esta misión será peligrosa.


-Jajaja Mmmm Menos de lo que imaginas, llegado el momento te contaré de que se trata.

viernes, 10 de enero de 2014

Capitulo 2 (2ª parte)


-¡Ay Dios! ¿Cómo que no puedes?

-No. Me tacharían de cobarde y es lo que menos necesito en estos momentos. A ver, hemos comenzado con mal pie. Hagamos un trato, yo te llevo hacia el lugar ese que necesitas ir para llevar a cabo tu misión y tú a tu vuelta le hablas de mi a mi madre y todos como un caballero honorable digno de la mayor honra y esas cosas.

-No entiendo nada. Primero me insultas e insultas a toda mi familia y lo que es más grave, dices no reconocer la ley divina por la que yo y todos los de mi familia gobernamos Gadeira, algo así como una sublevación hacia tu reina.

-Princesa, aún no eres reina.

-Sea lo que sea estoy por encima tuya, ¿No te parece?
 En fin, y cuando te digo que des media vuelta quieres no se qué, de que hable bien de ti con el fin de sabe dios que. Bien empezamos, estoy por volverme y dar parte ahora mismito. ¡Pero de todo lo contrario!

-No exactamente. Es un trato.

-¿Crees que se puede hacer tratos con la realeza? Más bien te vuelves y yo por ser hijo de quien eres no doy parte de que te metan en calabozos por traidor. ¿Qué te parece ese trato?

-En serio, disculpa, no he tenido unos días muy agradables que digamos. He tenido algunos problemas y todo el tema de aquella guerra, la muerte de mi padre y mi familia no despiertan en mí los mejores deseos hacia tu familia. Pero por favor, necesito llevar a cabo este trabajo, lo necesito.

-¿Qué te ha ocurrido y por qué tienes tanto interés en esto?


-Es largo y difícil de explicar.